Home > Belleza > Cómo saber qué tipo de piel tengo
¿Cómo saber qué tipo de piel tengo? Responder esta pregunta es muy importante, porque de ella dependen los tipos de cuidados que escogeremos para nuestra piel.
¿Qué tipo de piel tengo? ¿Es mixta mi piel? ¿Cómo puedo saber si es seca? ¿El brillo es señal de que tengo una piel grasa? Estas y más son preguntas que todas nos hacemos alguna vez, sin embargo, responderlas es importantísimo porque de cada respuesta, dependerá el tipo de cuidado que será necesario para la piel del rostro.
Índice
1. Por qué es importante saberlo
3. Seca:
4. Grasa:
5. Mixta:
7. Piel norma:
10. Casos especiales
14. Cómo saber qué tipo de piel soy
15. Cuidados tras la perforación
16. Seca:
17. Grasa:
18. Mixta:
Tu tipo de piel es algo que debes saber y conocer porque, como mencionábamos, de eso dependerá el cuidado pero además, porque de emplear un tipo de cuidado erróneo, podríamos dañar gravemente a largo plazo nuestro rostro.
Es el tipo de piel que se caracteriza por su falta de humedad y por presentar gracias a eso, una textura seca, marchita y sin vida. El objetivo siempre será, combatir estos problemas con hidratantes.
Todo lo contrario de la seca, ya que es una piel con exceso de los aceites propios y necesarios en la piel. Puede ser propensa a granitos y espinillas, así como mostrar un brillo excesivo en el rostro.
Una combinación de ambas pieles pero, con la característica de que presenta las áreas de grasa en la zona llamada T, o que es frente, nariz y barbilla, y una resequedad en mejillas y ojos, así como la piel del cuello.
Es la piel con una textura regular para cada etapa (edad), es el ideal pero, no siempre está libre de exceso de grasa o resequedad, sin embargo, estos estragos no la afectan tanto.
Una piel de las más delicadas, puede presentar problemas diversos como irritación, problemas de acné, de resequedad extrema, o de paños. Es una piel que requiere de muchos cuidados.
Puede ser el resultado de resequedad extrema, de productos contra el acné que son violentos con la piel, así como reacciones alérgicas a cremas o medicamentos.
Estas pueden ser producto de exceso de exposición al sol, por acné y espinillas así como, malos hábitos como exprimir los granitos o, por manchas en la piel grasa expuesta al sol.
No es un problema en sí, pero se recomienda considerar al dermatólogo cuando las áreas de lunares son excesivas pues, ofrecerá cuidados específicos. Lo mismo para la piel con pecas.
O lo que se conoce coloquialmente como piel cacariza. Es una piel en extremo sensible y que se debe cuidar pues, es común en casos graves de acné o incluso, en casos más delicados como, el de la piel quemada.
Verás que tu piel necesita de hidratación constante, ya sea interna o externa. Tu piel no será propensa a granitos, pero sí a verse ceniza y claro, a verse reseca.
Notarás que los aceites hacen ver tu piel incluso más grasosa, así como será propensa a los problemas de granitos o en caso de no cuidarse, de acné. Sin embargo, es una piel que se mantiene firme y con aspecto juvenil por más tiempo.
Tus áreas de brillo serán la zona T, ahí notarás que puedes padecer de granitos pero, no de acné a menos que descuides la limpieza del rostro. Las zonas secas serán ojos, mejillas e inclusive en las comisuras de los labios.
Sin embargo, para saber con más exactitud tu tipo de piel, acude a un especialista o dermatólogo, ya que cada piel precisa de un cuidado específico para garantizar que, con el paso de los años, tu rostro siempre luzca lo mejor que pueda según tu edad.
Lo Más Nuevo