Home > Pareja > Infidelidad Virtual: Qué es y cómo afrontarla
Con la tecnología moderna, vienen los problemas modernos. ¿Quieres saber de la infidelidad virtual? ¿Qué es y cómo afrontarla? Sigue leyendo.
Hoy en día, todos tenemos un celular en las manos, con el cual podemos acceder al internet, y navegar por muchas redes sociales. Pero, muchas parejas creen que todo es posible con un teléfono, y que en esa intimidad, y privacidad, todo está justificado.
Así es como la infidelidad virtual sale a la luz. Hay muchas apps que ya son anunciadas como “encuentros extra-maritales” o sitios para ciber-infieles.
Esto significa que hay parejas que hacen uso de este tipo de plataformas, para poder conocer otras personas para coquetear, mandarse mensajes picosos, o incluso, conocerse cara a cara.
Aunque mucha gente minimiza este problema, y considera que las palabras, y el intercambio de mensajes por teléfono, no tiene que ver con la infidelidad, para muchos otros, esto significa un quiebre en la relación. ¿Podrías superar una infidelidad de este tipo?
Índice
1. ¿Qué es una infidelidad virtual?
3. La comunicación es esencial
4. Intenta encontrar soluciones
6. El riesgo de no abordar la infidelidad virtual
Hablamos de una infidelidad virtual cuando uno de los miembros de una relación mantiene contacto con una persona, a través del teléfono, o redes sociales, con deseo de por medio y el otro miembro de la relación no tiene idea de que esto está pasando. Se intercambian mensajes arriesgados, fotos sensuales, etc. Si la otra persona no sabe que esto está pasando, es posible hablar de infidelidad.
Dependiendo de la red social en la que este intercambio de mensajes sucede, es posible que estas dos personas nunca se hayan visto en persona. Pero siempre existe la posibilidad de que haya un gusto que crece, más y más, y que, lo que antes parecía imposible, se empieza a volver una opción real.
Que tan serio, o no, se ponga el asunto, dependerá en lo que la pareja considera infidelidad, respecto a la otra persona. Sin embargo, no es tan claro que hay una decepción, mentira, y traición, pues lo que está pasando, no está siendo comunicado a su pareja actual. La parte virtual genera una situación que se mantiene en las sombras entre lo que se considera una infidelidad, y lo que no.
La llegada del internet le ha dado un nuevo significado a las relaciones humanas. De hecho, ha cambiado la comunicación entre las personas, y la manera en que se relacionan, sin importar la intención.
Amigos, parejas, amantes, familiares; todos han encontrado nuevas maneras de interactuar, y cada uno tiene un código en común, pero al mismo tiempo, diferente. Hay aquellos que inician amistades virtuales profundas con personas que no conocen, físicamente. Hay quienes se enamoran, y encuentran al amor de su vida.
Sin embargo, la infidelidad tiene un toque extra, pues los límites de lo que define un engaño en las parejas, ha cambiado. Este engaño, según especialistas, implica el hecho de la posibilidad de una tercera persona en la relación.
Empieza cuando una tercera persona se vuelve el objeto de un deseo físico, o amoroso, de uno de los miembros de la relación. La existencia de una pareja implica un contrato de amor, fidelidad, y exclusividad, de parte afectiva, y física. La llegada de una tercera parte, incluso si sólo es una idea, ya pone ese contrato en “jaque”.
Whatsapp, mensajes de texto, Facebook, o un DM en twitter, se han vuelto todo un tema en cuanto a la infidelidad se refiere. Por esta misma razón, las parejas que se separan, o deciden divorciarse, son cada vez más jóvenes, y por esa razón, las redes sociales suelen formar parte de las pruebas del engaño.
Revisar los celulares, y las computadoras, en busca de una señal de infidelidad, no es un gesto espontáneo, a menos que la pareja ya sea celosa. Empieza a formar parte de las sospechas de la infidelidad, que implican largas horas frente a la computadora, mensajes misteriosos, y conversaciones clandestinas.
La duda podría reducirse a esto: el engaño que sucede en redes sociales “solamente”, duele igual que el que sucediera de manera física, y personal.
La realidad es que una persona puede engañar, incluso sin tener contacto físico. Se añade al problema de la infidelidad, porque es una acción desleal. La infidelidad presume la presencia de un tercero. Pero, en realidad, inicia desde antes de que esa persona aparezca.
El campo se prepara desde antes. El engaño también es la separación del proyecto en común, sin advertencia. Es la ausencia emocional. ¿Una infidelidad virtual puede ser superada? Eso creemos, aunque tiene que haber mucho trabajo de parte de ambos para que la relación pueda fortalecerse.
Comunicar las sospechas que sientes no es agradable. La otra persona se puede enojar, poner excusas, o ponerse a la defensiva. Sin embargo, no hablar sobre lo que pasa, no mejorará nada. Sólo va a deteriorar la relación. Por lo tanto, es importante hablar sobre lo que pasa, y cómo llegó a este punto.
Las causas de la infidelidad virtual pueden variar. Desde el aburrimiento dentro de la relación, hasta la baja autoestima, la necesidad de emociones diferentes, sentirse deseado, o la falta de atención de la pareja.
Es importante tratar todo con calma, sin recriminar. La pareja afectada debe intentar encontrar soluciones, y es un trabajo de ambos. El proceso de recuperación de una infidelidad virtual no es ni fácil, ni corto.
Será muy difícil resolver los problemas derivados de una infidelidad virtual, sin ayuda de un profesional. Un terapeuta puede ser de gran ayuda. No dudes en acudir a una persona preparada para lidiar con problemas de pareja.
La infidelidad virtual sólo tiene dos salidas: una solución en conjunto, o que la pareja termine haciendo lo mismo que hacían: ser infieles virtuales. Si esto no se resuelve, en la primera instancia, y se permite que continúe, la relación no tendrá mucho futuro, y se puede volver muy tóxica.
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